La ETSAUN e Idea organizaron, por primera vez, un foro para tratar el envejecimiento desde el punto de vista de la arquitectura al que asistieron unas 150 personas. El encuentro contó con la intervención de distinguidos profesionales que analizaron las tendencias presentes y futuras.
Pamplona acogió durante el pasado mes de noviembre la I Jornada Europea de Arquitectura, Entorno y Envejecimiento. El foro contó con la asistencia de aproximadamente 150 personas que se reunieron con el objetivo de debatir el envejecimiento desde el punto de vista arquitectónico, tanto en la actualidad como en el futuro. El encuentro fue organizado por la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidad de Navarra e Idea Innovación y contó, además, con la colaboración de Obra Social La Caixa, Asbar y Foro Qpea.
La apertura del acto corrió a cargo del director de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Navarra, Miguel A. Alonso, quien resaltó que el envejecimiento de la población supone un reto al que «desde la arquitectura ya se está respondiendo». Además, destacó que para la arquitectura este envejecimiento «una gran oportunidad» para llevar a cabo nuevas construcciones, lo que supondrá la creación de «innumerables puestos de trabajo».
Durante el foro se trataron temáticas relativas a la vivienda, donde Dolores López, demógrafa de la Universidad de Navarra, habló del impacto que suponen para nuestros mayores los cambios demográficos en su estilo de vida y salud. Por su parte, Ana Sánchez-Ostiz, doctora en arquitectura por la Universidad de Navarra, resaltó en su intervención lo importante que es para las personas de avanzada edad que las viviendas dispongan de todas las medidas necesarias para facilitar su accesibilidad.
En la jornada también intervinieron otros profesionales de prestigio como Lesley Palmer, directora en INCH Architecture y arquitecta-jefe DSDC (Dementia Services Development Centre) de la Universidad de Stirling, quien quiso hacer hincapié en todos aquellos adolecidos de demencia y la necesidad de construir entornos para que estos se sientan lo más cómodos posible. Una intervención parecida realizó Nuria Carcavilla, psicóloga de Idea, que indicó los beneficios para las personas con demencia de que los centros de atención a los que acuden se adapten a ellas mediante la arquitectura, puesto que de lo contrario se «puede inducir a comportamientos problemáticos que constituyan una carga para los cuidadores».