Ilmiodesign ha estado al cargo del proyecto de interiorismo del nuevo restaurante Noi italiano en Madrid, que Grupo El Pradal acaba de inaugurar en la Calle Recoletos.
Por la idiosincrasia de la propia oferta gastronómica, la inspiración esencial a la hora de desarrollar el proyecto ha sido la ‘italianidad’. Desde el cromatismo, pasando por los materiales hasta la iconografía, el espacio respira y se basa en la Italia de los años 70. Así, Ilmio habla de un estilo ‘italiano pop’ que impregna el restaurante.
En la paleta cromática conviven en armonía vivos tonos terracota, rojos y verdes, característicos del país transalpino y su capital, Roma. Por su parte, los materiales utilizados han sido cerámicas, terrazos y celosías de hormigón, reflejo de la arquitectura italiana de la década de los 70.
El restaurante está organizado en tres espacios diferenciados por colores, pero que se conectan a través de un pasillo cuyo suelo rayado simula una lengua que orienta al cliente desde la puerta de entrada hasta los dos comedores. También, el juego de iluminación está pensado para guiar al comensal a lo largo del local.
Tres espacios
Espacio terracota. Se trata del primer espacio, a pie de calle, que simula una salumería típica italiana. Encontramos una versátil barra de terrazo donde poder degustar los producto italianos de la vitrina que reina la sala y es visible desde la calle. Junto a estos elementos, se disponen mesas altas y taburetes, como antesala al primer comedor.
Espacio rojo. El primer comedor está dominado por una serie de espejos ubicados en los paramentos y una lámpara longitudinal que ilumina la zona de mesas. El rojo intenso, característico de la pasión italiana, impregna las cuatro paredes. Esta sala dispone de un rincón con asientos altos frente a la cocina abierta, que ofrece un toque informal.
Espacio verde. Se trata del segundo comedor, que apuesta por este color como guiño a la italianidad que inspira el proyecto de interiorismo. Esta sala ofrece una estética dinámica y llena de vitalidad que invita a la degustación pausada de un típico plato italiano.