La importancia de equipamiento en un establecimiento hostelero es innegable. Disponer de una maquinaria consolidada, que facilite el trabajo de los cocineros y personal de sala, al mismo tiempo que aporta ese toque de sabor a la comida, es un elemento diferenciador muy a tener en cuenta. Ya no hablemos si este, además de todo ello, forma parte de la decoración de la sala. En ese caso, su labor trasciende al cocinado, dando paso a un símbolo que el cliente asociará con la identidad del local o la cadena, como el caso que nos atañe (salvo en aquellos locales cuya distribución no lo permite).
“Los hornos de piedra de los restaurantes Ginos son una de las señas de identidad más representativas de su propuesta de valor. Sus características técnicas nos permiten ofrecer el producto de calidad que buscamos: pizzas crujientes elaboradas al momento por nuestros maestros pizzaiolos con ingredientes frescos y de calidad. Además, nuestros hornos juegan un papel central en la creación del ambiente que caracteriza a nuestros restaurantes, que buscan ser una extensión de la cocina”, explica Pablo Ruiz, director de marketing de Ginos, en un artículo publicado en Mab Hostelero.
Para ello, incorporan a los locales hornos fabricados en la misma Italia, basándose en la experiencia y la elaboración de los platos del país durante años. Y semeja que han llegado a un punto realmente útil para ellos. “Su cúpula y su piedra refractaria microperforada facilitan una distribución uniforme del calor, que alcanza los 290º estables. Esta alta temperatura uniforme permite una cocción muy rápida, de en torno al minuto y medio por pizza. Gracias a ello, podemos obtener el característico crujiente de nuestras pizzas, a la vez que se respetan las características organolépticas del producto fresco y de calidad utilizado en su elaboración”, añade Ruiz.
La constancia y seguridad del equipamiento adecuado
Uno de los retos más importantes de las cadenas de restauración es el de lograr unos resultados consistentes. No importa a qué local entren de la enseña ni la hora del día, la experiencia culinaria y su calidad es innegociable. “En el reto de la consistencia, la base giratoria de nuestros hornos juega un papel muy importante, puesto que nos permite ir introduciendo hasta siete pizzas en el horno en diferentes momentos, sin necesidad de moverlas de sitio dentro del mismo, facilitando una cocción controlada y uniforme de cada una de ellas. Por supuesto, apostar por este tipo de hornos requiere de un compromiso claro por parte de la marca. En primer lugar, es fundamental garantizar una correcta formación de los maestros pizzaiolos. Asimismo, requiere también de un esfuerzo operativo especial, ya que su puesta en marcha y mantenimiento necesitan de unos recursos mayores que otro tipo de equipamiento”, detalla el director de marketing de Ginos.