Un restaurante como hasta ahora nunca se había visto, plenamente futurista y guiado por los avances tecnológicos, ¿será posible a corto plazo? Un proyecto de la Universidad Politécnica de Valencia en colaboración con el Grupo Sucursal lo pone un poco más cerca. Se trata Virtuchef, un nuevo concepto de restaurante que acopla tecnología y gastronomía para crear una experiencia de cliente inédita hasta la fecha.
Virtuchef reconoce a un cliente nada más entra en el restaurante y lo lleva hasta su mesa donde comienza realmente su experiencia cuanto menos sorprendente. La mesa es multitáctil e interactiva y, a través de ella, cuando el comensal se sienta, puede ver el menú y seleccionar directamente en ella lo que desea. Además, mientras aguarda por los platos, tiene al alcance de unos clics varios contenidos audiovisuales, adaptados a sus gustos, que harán la espera más amena.
Pero los elementos novedosos no se quedan aquí. Mediante un sistema de reconocimiento facial se identifica al cliente y se le propone una oferta totalmente personaliza, tanto en el aspecto culinario como en los vídeos de los que disfrutará entre plato y plato. Todo ello, eso sí, con el consentimiento previo del cliente.
Tecnología en cada rincón
Aparte de la mesa, Virtuchef cuenta con un tótem en la entrada del restaurante que reconoce al comensal, le da la bienvenida y puede seleccionar por él los contenidos que disfrutará en la mesa nada más sentarse. Asimismo, un sistema de cámaras que realiza un tracking personal, que recopila datos tanto de los clientes como de los empleados.
“Es un sistema que, mediante técnicas de visión por computador, permite ubicar a cada una de las personas que están en un área del establecimiento. Este sistema se integra con el tótem de bienvenida en el momento de la llegada al restaurante», explica Mariano Alcañiz, director del instituto I3B de la UPV.
A mayores, este restaurante completamente tecnológico dispone de una aplicación de realidad aumentada que permite al cliente interactuar con otros contenidos. En esta línea, tiene la posibilidad de ver las bebidas y los platos sobre la mesa en tres dimensiones, las características y componentes de cada plato o datos referentes al local. También tiene la opción de jugar con los distintos elementos de la mesa, como pueden ser los cubiertos, sobre todo en el momento en el que sirven los platos.
En un momento como el actual, tampoco podía faltar la posibilidad de compartir contenidos en las distintas redes sociales. En definitiva, un restaurante que pone al alcance del cliente un nuevo abanico de posibilidades aprovechando los últimos avances tecnológicos. Un mix entre restauración y tecnología que embaucará a más de uno y pone sobre la mesa un nuevo método de atracción para unos clientes cada vez más exigentes. Eso sí, todavía habrá que esperar un poco para verlo plenamente implantado, por ahora se seguirán haciendo pruebas para recibir un feedback de los clientes.